Perteneciente a la Iglesias Evangélicas Valdenses del Río de la Plata e Italia |
CULTO: domingo 25 a la hora
10:00.
ESTUDIO BÍBLICO: martes 27 a la
hora 16: en el salón.
ASOCIACIÓN DE HOMBRES: jueves
29 a la hora 20:30.
FONDO LUISA ROSTÁN: Se continúa
con la venta de tortas fritas y Wafles todos los sábados a partir de
la hora 16:00.
También para este fondo, hay venta de
bonos colaboración con un primer premio de una manta artesanal y
segundo premio una maceta con planta que se sorteará el último
sábado de mayo.
EXPERIENCIA DE VIDA
¿Cómo el cambio de
percepción cambió la forma de sentir actuar y pensar?
Recuerdo un “mini cambio” que
experimenté un domingo por la mañana en el metro de Nueva York. La
gente estaba tranquilamente sentada, leyendo el periódico, perdida
en sus pensamientos o descansando con los ojos cerrados. La escena
era tranquila y pacífica. Entonces, de pronto entraron en el vagón
un hombre y sus hijos. Los niños eran tan alborotadores e
ingobernables que de inmediato se modificó todo el clima. El hombre
se sentó junto a mí y cerró los ojos, en apariencia ignorando y
abstrayéndose de la situación. Los niños vociferaban de aquí para
allá arrojando objetos, incluso arrebatando los periódicos de la
gente. Era muy molesto. Pero el hombre sentado junto a mí no hacía
nada. Resultaba difícil no sentirse irritado. Yo no podía creer que
fuera tan insensible como para permitir que los chicos corrieran
salvajemente, sin impedirlo ni asumir ninguna responsabilidad. Se
veía que las otras personas que estaban allí se sentían igualmente
irritadas. De modo que, finalmente, con lo que me parecía una
paciencia y contención inusuales me volví hacia él y le dije: -
Señor, sus hijos están molestando a muchas personas. ¿No puede
controlarlos un poco más? El hombre abrió los ojos como si solo
entonces tomara conciencia de la situación y dijo con suavidad: -
oh, tiene razón. Supongo que yo tendría que hacer algo. Volvemos
del hospital donde su madre ha muerto hace más o menos una hora. No
sé qué pensar, y supongo que tampoco ellos saben cómo reaccionar.
¿Puede el lector imaginar lo que sentí en ese momento? Mi paradigma
cambió, de pronto vi las cosas de otro modo y como las veía de otro
modo pensé de otra manera, sentí de otra manera, me comporté de
otra manera. Mi irritación se desvaneció. Era innecesario que me
preocupara por controlar mi actitud o mi conducta, mi corazón se
había visto invadido por el dolor de aquel hombre. Libremente fluían
sentimientos de simpatía y compasión. “¿Su esposa acaba de
morir? Lo siento mucho….. ¿Cómo ha sido? ¿Puedo hacer algo?
Todo cambió en un instante, según
decía Thoreau “Mil cortes en las hojas del árbol del mal
equivalen a uno solo en las raíces.” Sólo podemos lograr una
mejora considerable en nuestras vidas cuando dejamos de cortar las
hojas de la actitud y la conducta y trabajamos sobre la raíz, sobre
los paradigmas de los que fluyen la actitud y la conducta.