Se trata de un gran ejemplo de producción verde, con condiciones de economía circular y con fuerte impacto social en el interior del país.
En el Foro Regional Forestal, parte de Uruforest 2024, el economista Ignacio Munyo presentó un informe de CERES sobre la producción de madera en Uruguay, destacando su crecimiento sostenible y su rol clave en la economía. El estudio subraya que la industria maderera no solo captura carbono y genera energía de biomasa, sino que también tiene un fuerte impacto en el empleo y los impuestos. Además, Uruguay se posiciona como productor de madera de alta calidad con demanda creciente, lo que augura un futuro prometedor para el sector.
El informe resalta el impacto regional, especialmente en zonas con menor desarrollo, y el fuerte encadenamiento productivo que genera dinamismo económico. Se reconoce que Uruguay tiene recursos sostenibles y acceso preferencial a mercados internacionales, lo que facilita la expansión de su capacidad industrial.
A pesar de las oportunidades, el sector enfrenta desafíos logísticos, como la necesidad de mejorar rutas y ferrocarriles, y costos altos en energía y transporte. Además, se menciona la burocracia excesiva para nuevas plantaciones. Sin embargo, con una demanda global en crecimiento y altos estándares ambientales, el sector maderero es clave para el desarrollo económico del país.