La firma uruguaya Fotmer S.A, dedicada
a la producción, investigación y al desarrollo del cannabis
medicinal, instaló los primeros 6 invernáculos de un total de 18,
que cuentan con tecnología de última generación y se encuentran
distribuidos en tres hectáreas y media en la Zona Franca de Colonia
Suiza, ubicada en Nueva Helvecia.
Allí se llevarán adelante cultivos
estandarizados de plantas de cannabis sativa, controlando las
condiciones ambientales, como luz, dióxido de carbono, flujo aire,
nutrientes y temperatura para alcanzar inflorescencias de máxima
calidad, a partir de las cuales se generarán productos que respondan
a los más altos estándares de investigación y desarrollo
farmacéutico.
Para lograrlo, Fotmer trabaja con
sistemas de identificación diseñados a nivel mundial para la
industria del cannabis, que permite conocer en tiempo real la
trazabilidad de cada planta, que se encuentra inserta en una maceta
con un sustrato inerte, lo que habilita el control de las sustancias
absorbidas y eliminan potenciales microrganismos o elementos que
contaminen o alteren su estructura química y física.
Los nutrientes necesarios son provistos
a través de un sistema de riego y fertilización que proporciona a
cada planta la cantidad de alimento que necesita en base al monitoreo
permanente de cada ejemplar.
“Al tratarse de productos de
perfil químico estandarizado, la empresa puede cuidar la cantidad
relativa de cannabinoides y otros compuestos como terpenos y
flavonoides presentes en la planta”, explicó Helena González,
Gerente de Calidad e Investigación y Desarrollo de Fotmer.
En línea con lo que establece el
Instituto de Regulación y Control del Cannabis (IRCCA), el predio
cuenta con las máximas condiciones de seguridad, un perímetro
cerrado con acceso restringido y controlado, cámaras, control de
accesos, alarmas y personal de seguridad.
La firma cuenta con un laboratorio
genético ubicado en el Parque de las Ciencias en el departamento de
Canelones, que está equipado bajo las mismas normas de seguridad.
Ambas instalaciones y los
procedimientos que se llevan adelante requirieron una inversión
inicial de US$ 7 millones y cumplen con lo establecido por la
Organización Mundial de la Salud (OMS), la Food and Drug
Administration (FDA), la American Herbal Pharmacopeia Cannabis
Inflorescense y la Eudralex “The Rules Governing Medicinal Products
in the European Union”, así como con los requisitos exigidos por
la normativa local que le permite realizar tareas de investigación y
desarrollo para la elaboración de inflorescencias secas de cannabis
de perfil químico estandarizado y de grado farmacéutico , y la
realización de extractos para la elaboración de subproductos.
“Nuestros desarrollos genéticos e
investigaciones conducirán a lograr calidades de grado farmacéutico
de extractos de cannabis que permitirán la obtención de productos
con diferente perfil químico para abordar distintas patologías como
el tratamiento del dolor, glaucoma, espasticidad muscular, apetito,
náuseas, entre otros”, agregó la experta.
Fotmer es una empresa que apuesta al
crecimiento y desarrollo del país, generando oportunidades de
trabajo para profesionales locales y demandando empleos con un alto
grado de especialización y puestos de trabajo indirectos.
Dentro de su equipo de profesionales se
encuentran biólogos, bioquímicos, ingenieros agrónomos, químicos
farmacéuticos y técnicos en hidroponía, que llevan adelante las
tareas de investigación con tecnología.
En la actualidad, la empresa emplea a
70 personas que se desempeñan en las áreas de laboratorio y
administración en el Parque de la Ciencias y en las áreas de
cultivo extensivo en la Zona Franca de Colonia Suiza.
Además, es una firma que aporta al
desarrollo de la comunidad científica del país, en tanto brinda
oportunidades de investigación en un amplio espectro de la ciencia y
contribuye a la evolución de la industria.
“Desde nuestro origen nos hemos
trazado el objetivo de aportar al conocimiento de las propiedades del
cannabis y brindar alternativas a la medicina para mejorar la calidad
de vida de las personas”, destacó González.
Sus desarrollos genéticos e
investigaciones conducirán a la obtención de productos con
diferente perfil químico para abordar variadas aristas terapéuticas
como el tratamiento del dolor, glaucoma, espasticidad muscular,
apetito, náuseas, así como de ansiedad, depresión, Parkinson,
Alzheimer y otras enfermedades neurodegenerativas.
La compañía, proyecta comenzar en
pocos meses a desarrollar un cultivo a gran escala acorde a lo
autorizado de hasta 35.000 plantas y diez toneladas de
inflorescencias secas anuales y trabajará en estrecha colaboración
con el Grupo de Química Medicinal de la Facultad de Ciencias (GQM)
de la Universidad de la República.