Ante el fallecimiento días pasados, de
mi tía, Irma Rivoir de Negrín, a los 90 años de edad, quiero
primeramente dar gracias a Dios por su vida, por los momentos que me
permitió compartir junto a ella, y además quiero hacer público mi
agradecimiento a dirección y personal del Hogar de Ancianos
Tarariras y a los residentes, por el cariño y dedicación que
siempre le y me supieron brindar en los 6 años de su paso por esa
institución, y en especial en sus últimos meses de vida, donde su
salud se vio desmejorada. También quiero agradecer a las enfermeras
de domicilios de Camec Tarariras, y a los médicos, en especial a su
doctora Susy Álvarez, por sus cuidados, cariño y dedicación, al
Club de Leones, por el préstamo de la silla de ruedas, como así
también a aquellos que nos acompañaron en su velatorio y posterior
sepelio, personalmente o mediante saludos a distancia, a todos muchas
gracias, y que Dios les bendiga ricamente.
Zully Rivoir
C.I: 3.065.022- 7