DOMINGO 26 DE JUNIO
2016, DÉCIMOCUARTO DOMINGO TIEMPO ORDINARIO
CELEBRCION DE LA
PALABRA DE DIOS
Hermanos, HOY NOS REUNIMOS EN EL TEMPLO
PARTA CELEBRAR LA Eucaristía, porque nos sentimos “iglesia”, es
decir, los que hemos sido llamados. Por el Señor Jesús para
trabajar en la mies del padre. Los cristianos somos los obreros o
trabajadores que ponen toda su energía al servicio del Reino de
Dios, un Reino que se realiza en la paz y en la justicia.
PRIMERA LECTURA: (Isaías 66,
10-14). El Reino de Dios llega como un río de paz para todos los
pueblos.
SALMO RESPPONSORIAL: ¡Aclame al
Señor toda la tierra!
SEGUNDA LECTURA: (San Pablo a
los Gálatas 6, 14 - 18). El cristiano está clavado en la misma cruz
de Cristo. Todo lo demás carece de importancia.
EVANGELIO: (San Lucas 10, 1 –
12.17 - 20)
Hemos sido llamados para trabajar en la
mies de Dios y para servir con desinterés a su Reino en el Mundo.
Aleluya “Que la paz de Cristo reine
en sus corazones; que la palabra de Cristo habite en ustedes con toda
su riqueza”. Aleluya.
ORACION DE LOS FIELES: (Clam
pág. 10)
OFERTORIO: En el ofrecimiento
del pan y del vino signos imprescindibles de la Eucaristía, pongamos
nuestras vidas con sus momentos de luz y de oscuridad, a fin de ser
transformados en una sincera esperanza de un momento mejor.
COMUNIÓN: La Eucaristía es el
alimento de los obreros de la mies del Señor. Esta es nuestra
fuerza: Jesucristo y su palabra.
DESPEDIDA: Somos enviados por
Jesucristo a anunciar la Buena Nueva, seamos ejemplo de discípulos y
vivamos como Él vivió. Con la alegría que nos da el envío.