El domingo cerca de las 21 horas se
denunció gran desorden y daños en una finca de la calle 23 de
setiembre, perteneciente a una funcionaria policial. Se presumía que
podía haber en el interior de la misma algún intruso.
Al concurrir los agentes policiales a
dicho domicilio toman conocimiento que además, en el interior de la
casa, había una persona sin signos vitales colgada de una piola.
Se presentó Policía Científica quien
hizo el relevamiento correspondiente de la escena y la Magistrada del
Juzgado de Tarariras. Luego de que el forense examinara el cuerpo,
determinó suicidio mediante ahorcamiento.