Las estadísticas del Instituto
Nacional de Carnes (INAC) indican que en julio último la faena de
vacas lecheras se incrementó en un 36% en comparación con el
registro correspondiente a junio. En efecto el abatimiento llegó a
7.190 contra 5.340 del mes anterior. Respecto a la faena de julio del
año pasado, disminuyó 4%. Cuando se analiza el acumulado en los
siete primeros meses de este año, la faena de lecheras asciende a
50.354, algo más de un 9% por encima de lo que la estadística
indica para el acumulado enero/julio del año anterior.
El año móvil cerrado en julio, exhibe
una faena de lecheras de 84.484. El máximo se había alcanzado en
mayo, con 86.122.
La participación de ganado lechero en
el total de ganado faenado también aumentó; asimismo la tendencia
es ascendente cuando se miden las lecheras respecto al total de
hembras faenadas.
Otro dato elocuente es que los bovinos
para leche enviados a plantas fueron el 7% en junio, un porcentaje
sólo superado por la estadística de INAC para agosto de hace cuatro
años.
Por otra parte, los datos de fuente
oficial manejados a nivel del Fondo de Financiamiento y Desarrollo
Sustentable de la Actividad Lechera (FFDSAL) ha permitido conocer con
base sólida que entre el primero de enero y el 30 de junio de este
año, ha desaparecido del sector un total de 89 productores. En
efecto, los registros oficiales indican que al empezar 2019 había
2.448 productores y que al finalizar junio quedaban 2.359.
El sector lechero continúa
experimentando un muy fuerte proceso de concentración.
Fuente: TodoTambo.