En la Comisión de Hacienda del Senado planteé una preocupación que atraviesa a todo el país: la decisión del Consejo de Formación en Educación (CFE) de reducir entre un 20% y un 30% la oferta educativa de los CeRP para 2026, afectando a cientos de estudiantes y docentes en todo el territorio, -comienza diciendo el comunicado de la Senadora María De Lima.
Esta medida implica la eliminación de grupos presenciales y semipresenciales, desmantelando estructuras académicas de más de 25 años y golpeando especialmente a estudiantes que, en su mayoría, son primera generación en acceder a estudios terciarios, jefes de hogar y jóvenes del interior que dependen de la formación pública cercana a su lugar de vida.
Los CeRP son una política de Estado que garantizó descentralización, equidad y acceso real a la educación terciaria.
Recortar su oferta significa retroceder en una política que permitió que miles de jóvenes de los departamentos del interior no tuvieran que abandonar sus hogares para formarse.
“Solicité formalmente:
* Revisar la proyección de grupos 2026.
* Garantizar la continuidad de la oferta presencial en todos los CeRP del país.
* Proteger los puestos docentes que sostienen la calidad académica.
* Reafirmar el compromiso con una educación pública, gratuita y de calidad en todo el territorio nacional”.
La formación docente es un pilar del desarrollo del país y del futuro de nuestros jóvenes.
Defender a los CeRP es defender equidad territorial, oportunidades reales y capital humano para el Uruguay que queremos construir -sentenció De Lima.